lunes, 7 de julio de 2014

JOSÉ FÉLIX BOGADO ¡Coronel de Granaderos a Caballo!

El año pasado se cumplieron 200 años de la creación del cuerpo de Granaderos, y este año, 187 de su disolución.
Si bien no hay certezas respecto del nacimiento del soldado, hay indicios que señalan que habría nacido en 1777, muy probablemente en la población de Yatayty, cerca de Villa Rica del Espíritu Santo, capital del Guayra, en la por entonces Provincia del Paraguay.

Previo al bautismo de fuego de los Granaderos en el Combate de San Lorenzo, Bogado -que como su padre era lanchero, y de allí la derivación del apellido, por aquello de que “bogaban” (remaban) en el río-, había sido tomado prisionero por los españoles junto a dos compañeros de una chalana, para evitar pudieran informar los movimientos que habían visto en el río. Tras la lucha, al producirse un intercambio de heridos y prisioneros, es rescatado, y el Capitán San Martín le ofrece incorporarse al Regimiento como “trompa de órdenes”, situación que efectivamente acontece el 5/02/1813. Puede decirse que era ya hombre hecho: tenía unos 35 años.
Trasladados dos escuadrones del cuerpo a incorporarse al Ejército del Norte para las Campañas al Alto Perú, marcha con ellos nuestro hombre. Allí con suerte dispar participa en Vilcapujio, Ayohuma, Tejas, Puesto del Marqués, Posta de Venta y Media y Sipe-Sipe, o sea: está en todas!
Acotemos que Venta y Media es el entrevero en el que el  bravo cordobés José María Paz, pierde la mano, motivo por el que será conocido como “El Manco” Paz; y digamos que tras los desgraciados sucesos de Sipe-Sipe, los granaderos “hicieron prodigio de valor y salvaron los restos del ejército cubriéndole en su retirada”.
Con San Martín ya en Mendoza, vuelve el cuerpo para incorporarse al Ejército de los Andes; corre 1816, y Bogado ya ha ascendido a Alférez.
El 12/02/1817, es herido en Chacabuco, pero por su valeroso comportamiento, recibe el grado de Tnte. 1º del 4º Escuadrón de Granaderos.
En septiembre de ese año al frente de 20 granaderos, tras el Combate del Manzano, carga sobre el enemigo que se repliega hacia Gualpen en la intrincada montaña, el que pierde allí todo su armamento y 50 hombres. El Gral. O’Higgins, en su parte, lo destaca junto al Cnel. Freyre y el Cmdte. Escalada.
Integra las tropas expedicionarias que accionan sobre las fuerzas españolas que dominaban Perú, ingresando en Lima con el ejército vencedor el 9/7/1821, recibiendo la medalla concedida a los oficiales, con el lema: “Yo fui del Ejército Libertador”.
La azarosa vida militar en Perú ha de culminar el 9/12/1824 cuando al frente de 80 granaderos interviene en la decisiva jornada bélica de Chacabuco, sellando el destino independiente de Hispanoamérica. Se lo premiará con Medalla de Oro y la designación de “Benemérito en Grado Eminente”, y es el propio Bolivar quien lo asciende a Coronel, prácticamente en el campo de batalla, extendiéndosele los despachos oficiales seis meses después, el 9/06/1825.
Batalla de Ayacucho 9/12/1824

Le cabe ahora el alto honor de regresar “los resto” de los glorioso Granaderos al Buenos Aires que los viera nacer en 1812, y será, según el capitán e historiador Jacinto Yaben, el 13/02/1826 el día del arribo, siendo unos meses después disuelto el glorioso cuerpo, por orden de Rivadavia.
Y al ser destinado en “comisión”, como Jefe del 4º Regimiento de Caballería de Milicias,  se despide de sus compañeros de ardorosas gestas, con sentidas palabras, como las de este párrafo: “…vuestro coronel os dirige el más tierno y afectuoso adiós. Esta es la vez primera que con el sentimiento más profundo, tengo que despedirme de un regimiento en que siendo uno de los simples soldados pundonorosos llegué a obtener el mando honroso de coronel,…”.
Su último destino será ser Comandante Militar de San Nicolás, desde principios de 1829 y hasta noviembre, residiendo en la casa de calle Francia 223 (nominación actual) de dicha localidad, que aún se mantiene en pie y que reviste carácter de Monumento Histórico Nacional.
A aquel lanchero, prisionero en San Lorenzo al despuntar 1813, le cupo el alto honor de ocupar el lugar del Capitán San Martín, para retornar el terruño a los ya célebres Granaderos. Solo 7 hombres de la hora fundadora lo acompañaban.
José Félix Bogado, falleció en San Nicolás de los Arroyos, soltero y “de edad como de 52 años…” según la partida de defunción, el 20/11/1829.

Cierra el doctor Milanta su Oda “Al Coronel Bogado”, diciendo:
(…)
al pie de tu estatura de aire y cielo,
tierra, mármol, efigie, corazón y puño,
en cabal signatura de hombre, sólo hombre,
¡que más para la historia de inmortales coroneles,
como el que más y como todas las coronas con laureles!

Nuestro respeto y reconocimiento a un héroe olvidado. Otro de esos verdaderos patriotas que poco se recuerdan.

La Plata, 15 de Julio de 2013

Bibliografía Consultada

De la Torre, José – El Paraguayo Bogado, un granadero de San Martín (Diario La Capital,
                                24/07/1955)
Migliarini, Miguel Ángel – José Félix Bogado ejemplo de la historia sudamericana (1998)
Milanta, Atilio – Rapsodias nicoleñas (1992), y “Odas” (2012)

Yaben, Jacinto R. – Biografías Argentinas y Sudamericanas -Tomo II- (1953)

(Publicado en revista El Federal, sección "El Tradicional", Nº 453)

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